Miguel Cardoza
@MiguelCardoza
San Fernando de Apure
Desde
las 7 de la noche del jueves trasladaron los cuerpos de los estudiantes de
medicina fallecidos en accidente de tránsito en la vía Calabozo – San Fernando,
eran las 12 del mediodía del viernes y
aún no había patólogo por lo que no habían sido entregados a sus familiares. A
las 10 de la noche aún los fallecidos estaban en el piso “porque no había ni una camilla”.
La
larga espera y ausencia de respuesta indignó a los familiares quienes
decidieron cerrar la emergencia del hospital aproximadamente a las 10 de la
mañana e incluso encendieron cauchos para presionar a algún organismo a darles
respuestas, no obstante, cuando se presentó una comisión del Cicpc a trasladar
los cadáveres a Calabozo, los familiares se oponían debido al costo que ello
representaba en traslado, no obstante, se comprometieron a traerlos de regreso.
“La
Dra. que estaba de guardia el jueves quedó en llegar a las 7 de la mañana y no apareció. Hay quienes no
tienen como pagar el traslado por el elevado costo. No es justo que en este
estado donde hay patólogos se los lleven a otro estado. Nadie quiere problemas,
lo que queremos son nuestros familiares para llevárnoslo”, expresó entre el
dolor y la ira María Díaz.
Un
grupo de familiares acudió acudieron a la Defensoría del Pueblo y Fiscalía,
ambas instituciones no les colaboraron. Díaz aseguró que no se les atendió
porque no eran delincuentes, por lo tanto no había temor que los parientes
arremetieran contra los responsables.
“El
director del hospital fueron a hablar con el y se escondió”, dijo. Se quejó que
pese a ser estudiantes de medicina y uno de ellos trabajador de dicho centro de
salud no se agilizara la entrega.
María
Yayes, familiar de uno de los fallecidos y compañera de trabajo de otra de las
víctimas, también se unió al reclamo. “No se puede justificar que los jefes
brillen por su ausencia, que unos se vayan y otros se desaparecen. Tomen cartas en el asunto, todos los días hay
muertos y no hay con quien contar”, cuestionó la ciudadana criticando que las
autoridades regionales no les importe lo que sucede, ya que aseguró
habitualmente se presenta este tipo de situaciones.
“La subdirectora del hospital dijo que escapaba de sus manos y el
director no apareció”, comentó Yayes instando al gobernador a que se de cuenta
con cuales funcionarios cuenta y resaltó que su gestión está quedando manchada
ante la opinión pública. De igual forma, José Gregorio Torrealba calificó el
problema como un a humillación. Resaltó que los cuerpos estaban en vía de
descomposición y aún así se dignaban en buscar pronta solución. Aseguró que
como ciudadanos se les violentaron múltiples derechos sin que nadie abogara por
ellos como apureños.
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