San Fernando de Apure
Las intervenciones del presidente Hugo Chávez, en las distintas reuniones o asambleas de organismos internacionales, parecen estar más enfocadas a su audiencia particular de seguidores que asistentes a las mismas.
En reciente la asamblea general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), como sucede habitualmente, pronunció su discurso sin el sustento de un informe o guión, y habló ante el auditorium con acusaciones como elemento predominante, aunque paradójicamente la reunión era en búsqueda de soluciones, a problemas puntuales, como el calentaiento global.
A través de sus participaciones en los escenarios internacionales, se ha evidenciado que el Presidente antes que aportar soluciones o estrategias, a problemas regionales, con regularidad asume una posición parcializada lo que impulsa su discurso hacia las acusaciones, aspecto que en algunas ocasiones le ha dado el rating; unos lo vemos con recelo otros con admiración (no digo que sean ignorantes), porque consideran es la postura debida ante potencias como EE.UU.
De mi lado, reconozco:
- Venezuela necesita contundentemente de Estados Unidos
- No se puede negar los errores cometidos por la potencia norteaméricana, en cuanto a la política para Latinoamérica, sin embargo,no es el argumento sólido para continuar la arremetida
Pero al mencionar los dos puntos anteriores llego a la conclusión de la continua arremetida presidencial.
El presidente Chávez, más que hacer frente a la que considera "estrategia equivocada", busca fundamentar su postura en temas de índole regional, no para solucionar problemas continentales, sino para afianzar así su discurso de líder mundial.
Afortunadamente Barack Obama ha sido cauteloso y le ha restado importancia a las intenciones chavistas, de tomar relevancia y quedar ante el mundo como el heroe.
Refiriendome una vez más a la asamblea de la ONU, el primer mandatario Venezolano, se preguntó "¿Será que hay dos Obama?" Esta interrogante la hizo luego de rechazar la presencia norteamericana en las bases militares colombianas; y para culminar sus frases directas al presidente estadounidense, lo invitó "Obama unete al eje del mal".
Obama actuó con cordura, y no respondió, al menos por lo pronto. Ignoró las declaraciones.
Para Chávez, el no haber logrado un pronunciamiento de su homólogo norteamericano, supongo, fue un revés al no concretar la atención que buscaba.
Todo este intento que intentaba elevar el "rating político" fracasó, no obstante, previo a la asistencia a New York, hizo un recorrido por varios países, unos dictatoriales otros con democracias débiles o simplemente con diversas causa de enfrentamiento con EE.UU, como Irán que está acusado de enriquecimiento de Uranio, (para convertirlo en Plutonio, el material necesario para fabricar una bomba atómica), o Rusia que aunque más diplomático tiene roces con el país del norte; en fín, un paseo por el "eje del mal" con el objetivo aparte de afianzar la "unión", hacerse sentir en el ambito internacional.
En lo particular, observo una clara intención de provocar y llamar la atención:
- Recorre el "eje del mal"
- Debido a la poca importancia dada a su periplo, menciona su viaje en la ONU e invita directamente a Barack Obama a unirse al grupo.
La estrategia presidencial en ambas ocasiones, no produjo resultados, al menos inmediatos, así que en pocos días accionará una nueva "medida populista" luego que su asistencia a naciones unidas, (donde no llevó ni una sola propuesta concreta y viable a los problemas expuestos), no le produjera el resultado esperado.
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