Miguel Cardoza
@MiguelCardoza
San Fernando de Apure
“Racionamiento
es racionamiento, con huella o con libreta”, desde esa perspectiva la Cámara de
Comercio del estado Apure cuestiona la implementación del Sistema Biométrio en
los supermercados, mecanismo que iniciará en los estados fronterizos.
“En
Cuba la libretica funciona porque la movilidad de la población es más limitada
y los registros están respaldados en el documento que el comprador lleva
consigo. Pero la implementación tecnológica del mismo proceso no es sencillo”,
dijo Vito Vinceslao, presidente del gremio de comerciantes.
La
primera razón por la que se opone a este sistema es porque se necesitará
crear una nueva base de datos con la información biométrica de los compradores.
El empresariado se ha pronunciado manifestado que las huellas recolectadas por
el Saime no están digitalizadas y el CNE solo tienen cuatro huellas captadas
(ambos dedos índice y ambos pulgares). Las huellas dactilares de cada dedo son
diferentes, razón por la cual se tendrá que levantar una nueva base de datos
que correlacione las 10 huellas dactilares al número de cédula del comprador.
También señaló que se requiere
una conexión a internet en cada punto de venta y cajas registradoras con
capacidad de hacer las peticiones a la base de datos centralizada. “Podrá
implementarse en grandes ciudades, pero difícilmente en el interior del país”,
dijo Vinceslao, agregando que habrá que sistematizar a pequeños abastos y
quincallas que carecen de infraestructura técnica y recursos para la
adquisición de los equipos.
Se preguntó “¿qué pasa si se cae el
sistema o la conexión del local a internet, tal como sucede en los bancos? ¿No
se le venderá un producto regulado a un cliente incluso si no lo ha comprado por
falta de sistema o conexión?”. Indicó que se deberá crear un acceso al sistema
biométrico de manera inalámbrica para poder controlar las ventas en mercados
públicos y de calle.
Comentó que será necesario
definir el tiempo estimado para que un comprador pueda volver a acceder al
mismo bien o producto. “Por ejemplo, una familia de tres miembros consume un
litro de leche mucho más rápido que una sola persona”, acotó.
Asegura
que las razones del desabastecimiento van más allá del contrabando del 30% del
que habla Nicolás Maduro. “Cuando un padre de familia tiene que llevar leche a
la casa y no la encuentra por varios días, al momento de verla pretende tratar
de llevar un poco más para tener un resguardo para la familia”, una práctica
completamente comprensible y que no podrá taparse el sol con un dedo”, expresó Vinceslao
afirmando además que todo atenta contra la misión del gobierno de reducir las
colas.
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