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San Fernando de Apure
Para el economista Marcos Hernández el origen de la Ley de Costos y Precios justos, radica en el problema inflacionario que enfrenta el país en los últimos años y que cada mes aumenta. “Pese a que en principio se pensaba que los altos precios petroleros suponían que la oferta interna mejorará considerablemente y eso no ocurrió, por lo tanto en contraparte lo que hubo fue un efecto notorio de la demanda, mayor dinero hacia la calle” expresó.
Asegura que frente a una oferta que ha crecido inferior a las exigencias y cantidad de población hay un desbalance entre los bienes que se ofertan en el país y la demanda. Coincide con otros analistas nacionales que señalan la imagen positiva que quizá le tienen algunos consumidores, sin embargo así no lo ven desde el punto de vista macroeconómico.
IDEA ¿REPETIDA?
Recordó que en otras épocas el país ha experimentado este tipo de medidas para reducir el precio en los diferentes rubros y no ha tenido éxito. “En el año 1995 en el Gobierno de Jaime Lusinchi, se intentó hacer lo mismo con una comisión que estaba integrada por el gobierno, trabajadores y empresarios y no surtió efecto” dijo.
Indicó que estos son mecanismos implementados como una expresión del fracaso de la política inflacionaria convencional. Afirmó que este tipo de acciones pudieran provocar el incremento de la actividad informal y la especulación aunque el gobierno diga que con esta medida pretende frenar el alza indiscriminada de los precios.
“Los que van a estar sujetos a estos controles serán los comercios formales y habrá una desviación al comercio informal, así como la escasez de productos que no se expenden en los automercados, pero que sí se encuentran en las periferias de los mercados populares pero a un precio cuadruplicado” expresó.
¿SE CUMPLIRÁ LA LEY?
Hernández refirió que la ley aunque sea complicada se va intentar hacerla cumplir. “Se va meter en cintura a los industriales y comerciantes, pero la ley va tener efectos nocivos de muy difícil implementación. Va aumentar la burocracia, porque el estado requerirá de una administración burocrática”.
NO SE SOLUCIONA LA ESCASEZ
Es enfático al señalar que el problema de la escasez no se solucionará con esta norma. “Puede aumentar la escasez, porque muchas empresas van a evitar participar en la actividad económica por aspectos de seguridad jurídica en un mercado capitalista a pesar que se diga que aquí hay un esquema socialista que no existe en Venezuela”.
LAS MAS AFECTADAS SON LAS PEQUEÑAS EMPRESAS
Para el economista las más afectadas serán las microempresas porque manejan volúmenes pequeños de inventarios, no pueden almacenar por mucho tiempo la materia prima y tienen problemas en el flujo de caja, “porque tienen menor capacidad competitiva, son más vulnerable y tienen menor capacidad de adaptación”.
CONTROL DE CAMBIOS
También aprovechamos la oportunidad para consultarle sobre el control de cambios que impera en el país desde el año 2003. Ratifica lo que a diario resalta la prensa nacional e internacional, es decir, este tipo de estrategias impide el libre acceso a la moneda e introduce nuevos elementos en el mercado cambiario. “Tenemos un dólar normal pero también tenemos un mercado negro, donde se tranzan divisas cuando no llegan de manera oportuna y se requieren para importación” acotó.
Calificó de “burladero” el mercado informal de divisas donde comerciantes e industriales se aprovechan y lo utilizan para elevar los costos. “Lo deseable sería que no hubiera control de cambio porque los controles de cambio son medidas temporales, mientras la economía entra en una etapa de confianza”. Como ejemplo expuso “cuando una persona tiene una hemorragia y se le aplica un torniquete, mientras llega a un centro asistencial y se le aplique una terapia más consistente… el caso es que Venezuela, tiene un control de cambio desde el año 2003 y no se puede tener un país con un torniquete durante mucho tiempo porque terminará con una gangrena debido a que se obstaculiza la posibilidad de circulación”.
EL POR QUÉ DE LA FUGA DE DIVISAS…
Finalmente explicó que la fuga de divisas se produce por desconfianza en nuestro signo monetario. “La gente saca el dinero hacia monedas que tengan mayor seguridad y solidez… si retorna la confianza a la moneda nacional el control de cambios no será necesario. Mientras haya desconfianza habrá fuga de divisas y se mantendrá el control”.
PERFIL
Marcos Hernández es economista, egresado en el año 1976 de la Universidad de Carabobo. Ha realizado dos maestrías, una en Planificación y otra en administración en la Unellez. También es profesor titular jubilado de la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez.
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