Asesina y mete en el congelador a sus hijas adoptivas

Reporte de Noticias 24

Una madre adoptiva es la principal responsable del hallazgo que hicieron autoridades estadounidenses en Washington, quienes encontraron en un congelador los cadáveres de dos niñas. Además, a la mujer se le acusa de maltratar a otra ñina de siete años.
La menor de siete años magullada y hambrienta que caminaba por un camino de gravilla permitió a los investigadores hacer un descubrimiento macabro: restos humanos en el congelador del sótano que, según su madre adoptiva, pertenecían a las hermanas de la niña.
Las autoridades dijeron creer el lunes que la madre, Renee Bowman, es responsable de haber matado a sus otras dos hijas. Las tres eran niñas adoptivas a cargo de Bowman antes de que ésta las adoptara formalmente.
Los agentes investigaban una denuncia de abuso cuando descubrieron los restos de las niñas recubiertos de hielo. La madre dijo que habían estado en el refrigerador durante por lo menos siete meses y la policía considera caratular el caso como homicidio.
“Creemos que la madre, que adoptó a las dos niñas, es la responsable”, dijo el teniente Bobby Jones de la policía del condado de Calvert.
Se necesitarán autopsias para confirmar si se trata de las niñas, que deberían tener 11 y 9 años. Los agentes hicieron el macabro descubrimiento en Lusby, a 80 kilómetros (50 millas) al sudeste de Washington. Habían ido a la casa con una orden de allanamiento para investigar lo que había ocurrido con una niñita de siete años que había sido divisada vagando por el vecindario, lastimada y hambrienta, con una camiseta manchada de sangre y excrementos.
Bowman, de 43 años, fue arrestada y un juez ordenó que quedara detenida sin fianza. Se le acusa de abuso infantil de primer grado por una golpiza a la niñita.
“Le pregunté si estaba bien. Me dijo que no”, contó el vecino Phillip Garret, que halló a la pequeña caminando por la calle. “Me dijo ‘Mi madre me mata a golpes todo el tiempo”’.
La niña había escapado de un cuarto donde estaba encerrada saltando de una ventana del segundo piso, y Bowman admitió haberla golpeado con un zapato de tacos duros, dijeron los policías.